Diversos estudios han observado que los adolescentes no practican actividad física suficiente para garantizar un buen estado de salud. Más del 80% de los adolescentes de todo el mundo no llegan al nivel mínimo recomendable de una hora de actividad física al día.
La actividad física trae consigo beneficios como mejora de la capacidad cardiorrespiratoria y muscular, salud ósea y cardiometabólica, tiene efectos positivos en el peso corporal, en el desarrollo cognitivo y la socialización. Muchos estudios demuestran que los beneficios a la salud que trae consigo la actividad física se mantienen hasta la adultez.
Es importante mencionar que respecto a las diferencias por género las niñas realizan menor tiempo de actividad física.
Ante esto se debe buscar alternativas más llamativas que atraigan el interés de las niñas pues es común que haya más equipos deportivos de niños dejando a un lado los gustos o intereses de las niñas.
Idealmente las escuelas deben tener actividades para todos los gustos, se debe destinar una cantidad suficiente de fondos económicos a la promoción y ejecución de actividades que llamen el interés de los niños y jóvenes.
En estas estadísticas solo se tomaron en cuenta la población escolarizada pero hay que recordar que desgraciadamente una gran parte de la niñez y juventud no tienen la posibilidad de asistir a clases.
En muchos casos la inactividad física y el sedentarismo están relacionados con las posibilidades económicas de las familias, es por esto la importancia de poner al alcance de todos las actividades extraescolares que inciten a los niños y jóvenes a moverse.
Organización Mundial de la Salud. “Un nuevo estudio dirigido por la OMS indica que la mayoría de los adolescentes del mundo no realiza suficiente actividad física, y que eso pone en peligro su salud actual y futura”. Noviembre 2019.